
PORQUE LA VIDA ES MUY CORTA PARA COMER PAN SIN ALMA
Detrás de cada pan, cada croissant y cada pastel que encuentras en Eric Kayser, hay algo más
que harina, mantequilla y pasión: hay una historia de amor por el buen comer.
Eric Kayser nació en una familia de panaderos en Francia. Como Compagnon du
Tour de France, recorrió su país durante años formándose con los mejores maestros artesanos.
Luego, como profesor en el Instituto Nacional de Panadería y Pastelería, dedicó casi una
década a transmitir la tradición panadera francesa por todo el mundo.
Su misión:
devolverle al buen pan el lugar que merece dentro de la alta gastronomía.
En 1996, abrió su primera boutique en París. Desde entonces, Eric Kayser se ha convertido en
un referente mundial de la panadería artesanal francesa, con presencia en más de 25 países, y
con un objetivo claro: que cada persona pueda disfrutar, cerca de casa, de un pan que
realmente valga la pena.
La historia de Eric Kayser en Chile
Un sueño franco-chileno que empieza con una decisión valiente.
En 2012, dejamos atrás nuestras carreras corporativas en Francia —y una vida cómoda pero con
poco sentido— para comenzar un nuevo capítulo en Chile. Somos Julie Fouard y Christian
Beaujanot, una pareja franco-chilena unida por una convicción:
El buen pan, la buena bollería y la buena pastelería no deberían ser un lujo… deberían ser un
derecho diario para los amantes del buen comer.
Elegimos la marca Eric Kayser porque representa exactamente eso:
sabor, autenticidad, respeto por los ingredientes y orgullo por el oficio.
Instalarse en Chile sin el respaldo de una marca reconocida habría sido abrir una panadería
más.
Nuestro propósito era distinto:
traer a Chile un verdadero referente mundial de la panadería francesa artesanal.
¿POR QUÉ LO HICIMOS?
Porque estamos cansados de panes sin fermentación, bollería congelada con más aditivos que mantequilla, y pasteles que saben solo a azúcar. Porque sabemos que se puede ir más allá en calidad y respeto por el consumidor. Porque creemos que cada bocado debería tener sabor, aroma, textura y autenticidad. Porque tú también mereces elegir con conciencia y disfrutar con intención.

Nuestra promesa
Queremos que entres a una de nuestras boutiques, y vivas un momento especial.
Que disfrutes de un croissant crujiente y digas “esto sí es mantequilla”.
Que descubras un pan de masa madre que no solo acompaña una comida, la eleva.
Que te sorprendas con la variedad, la frescura y el amor con que hacemos cada producto.
Creamos Eric Kayser Chile para que no tengas que conformarte con menos.
Para que disfrutes de lo mejor de la tradición francesa sin salir del país.
Para que vivas el placer de comer bien, todos los días.
Porque el pan no es solo pan.
Es cultura, es historia, es oficio, es tiempo, es amor.
Y aquí, en Eric Kayser, lo tratamos como tal.